Poeta de la Utopía
Son muchos los escritores y escritoras que han cantado en prosa o en verso a la Utopía. Uno de ellos es Mario Benedetti, a quien desde aquí quiero hacerle un pequeño homenaje.
Mario Benedetti, te conocí poco y nunca de primera mano, sino a través de amistades y amores.
¡El poeta citado!
Y ahora, en la muerte, la distancia y el tiempo, me he puesto a conocerte…y me llegas claro e intenso, como te había imaginado.
El poeta del amor; no del amor perfumado de Becker, ni del amor doloroso de Neruda (aunque todo tiene su momento), sino del amor contento, vivaracho y dinámico.
El amor que te empuja, te libera y te transforma, del amor con mayúsculas.
Un amor que no se mira el ombligo, que no mira para otra parte,
Un amor que incluye lo propio y lo ajeno,
Los sentimientos más individuales y los más humanos.
Lo sé, también novelista
Decidor de libertad,
De muchas verdades en pocas palabras…
Yo diría que con frescura;
Pero sobre todo poeta,
Poeta de la alegría,
Poeta de la esperanza.
Y es ese amor privado y al mundo lo que le llevó a una gran implicación social y lo que le lleva a vencer la muerte (“El amor como compensación de la muerte” en palabras de José Saranago), no a la muerte real sino a la idea de muerte del día a día, al “sin sentido”-
“No te salves” dice en su poesía…y suena un eco que parece decirnos:
No nos salvemos, ojalá la muerte no nos coja salvados.
La literatura de Benedetti es un canto a la verdadera ciudadanía y cuando se lee salen solas las palabras dichas por él
“Cómo voy a creer
Que el mundo se quedó sin utopías”
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