BOTELLÓN EN MÁLAGA.
Leo en la prensa diversos artículos sobre la prohibición definitiva por parte de la alcaldía del botellón en la calle. Primero fue el traslado desde la plaza de la Merced hasta el Paseo de los Curas. Ahora, las obras del puerto hacían necesario un nuevo traslado. El Ayuntamiento de Málaga ha optado por la prohibición definitiva a beber en la calle.
Desde mi punto de vista, el traslado del botellón desde la Plaza de la Merced a otro lugar era necesario. Las molestias generadas a los vecinos y la suciedad provocada en uno de los puntos más bonitos de Málaga no daban muy buena imagen. Pero, ¿es necesario suprimir el botellón.
La mayoría de los analistas hablan del botellón como algo negativo. Ahí, me gustaría matizar una serie de aspectos. Aunque los medios de comunicación hagan ver que todo el que va al botellón se emborracha, la verdad es bien diferente. Muchos de los que van al botellón lo hacen como un punto de encuentro social con los amigos. Los medios de comunicación siempre buscan el lado morborso, es decir, buscan a chicos jóvenes que aparezcan hasta arriba de copas y no nos muestran a aquellos que no aparecen en estados ebrios. Para muchos el botellón era un punto de encuentro social donde charlar con amigos a los que hace tiempo que no se ven.
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