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BANKIA
Y LA MORALIDAD
Acabo de ver en un canal de televisión a
los pútridos tertulianos de guardia. Ninguno ha dicho lo que, por lo demás,
salta a la vista al calor del caso Bankia: nuestro problema no es la deuda
pública, sino la contraída por inmorales instituciones privadas. Se está
recortando el gasto social para rescatar a los bancos que han especulado con el
dinero de todos. Y no hay nadie, absolutamente nadie, en la cárcel ni ninguna
causa legal abierta al respecto. ¿Qué pesará más en los periodistas: su
proverbial ignorancia o su sumisión a los poderosos?
Totalmente de acuerdo y, como dice mi madre, el dinero ni se crea ni se destruye.... cambia de mano.
ResponderEliminar¿en manos de quién está ahora? porque no será en la nuestra, por lo menos, en las mías....