15 DE OCTUBRE: BIEN, ESPERANZADOR. MARINA FLOX BEN.

ESPERANZA

15 de octubre, bien, esperanzador, es todo lo que puedo decir. Cuelgo un par de fotos que nos recuerdan la necesidad de que continúe teniendo carácter global y la importancia de las instituciones. Podríamos haber sido más, deberíamos haber sido más, pero no voy a ser ni tan optimista como para decir que fue todo un éxito, ni tan pesimista como para tildarlo de fracaso. Fue un avance, un paso, lo cual ya es mucho.

No sé cuáles serán las verdaderas cifras, pero diría que había entre 2 y 3 veces más de l@s que estuvimos tanto el 15 de mayo como el 19 de junio (hablo sólo de Madrid). Un amigo estaba un poco-bastante enfadado porque lamentaba que ese apoyo masivo en la calle no se aprovechara para traducirse en un apoyo masivo en las urnas. Lamentaba que en las asambleas se produjeran básicamente sólo documentos y documentos, y no sirvieran para articular una opción de voto. Yo no tengo tan claro que un apoyo en las calles se tradujera en un apoyo en las urnas (de hecho lo de "apoyo" no me gusta nada), pero también hay gente que no pudo salir a la calle y sin embargo sí votará y votaría esa opción el 20N.

Han ido pasando los plazos: para constituirse en una formación política, para apoyar a nuevas formaciones... ahora tenemos que jugar con lo que existe, sin posibilidad de crear.

Yo, que intento ver el lado útil de todo, pensé el sábado que incrementar los apoyos, salpicar los medios de comunicación, mantener vivas las ganas del cambio, mantener la esperanza en la gente, es algo muy importante. Si estamos recorriendo un camino, es tan importante andar, como alimentar el espíritu para no caer en el desaliento. Para eso sirve el salir a la calle y ver desplegar pancartas, oír corear ingeniosas rimas con rabia y muchas ganas, etc.

Sin embargo, todo eso no basta, no es suficiente, no sirve de nada si no se avanza también en otros sentidos. Por eso, estando en Sol me preguntaba hasta qué punto era esperanzador lo que allí veía. El número de gente se había multiplicado, pero en gran parte era porque se habían unido muchas personas que lucían la famosa camiseta verde, pero también había otras camisetas, amarillas, por ejemplo, pidiendo la readmisión de l@s despedid@s en UPS; quiero decir... ¿hace falta que veamos nuestra casa en peligro? ¿nuestro puesto de trabajo? ¿la educación de nuestr@s hij@s? ¿la salud de nuestros padres? ¿Qué hace falta? ¿Si no nos toca directamente no salimos?

Ya son much@s l@s parad@s, l@s desahuciad@s, l@s que tenemos un trabajo precario, l@s que se han tenido que marchar a otro país, l@s que tienen que cuidar a l@s niet@s por no tener escuelas infantiles, l@s que no sabemos lo que comemos cada día, l@s que no sabemos si es verano o es invierno, etc., es decir, ¿qué queremos? ¿dejará de salir a la calle el/la trabajador/a readmitid@? ¿Dejarán de salir a la calle, suponiendo que ahora salen, l@s emplead@s de las Cajas que ven peligrar su estabilidad y desean fusiones y más rescates a la Banca? ¿Seremos capaces de saber valorar de un modo objetivo lo que hacemos y lo que supone nuestro trabajo? ¿lo que hacemos con nuestros ahorros? ¿las consecuencias de nuestras compras? ¿de nuestros silencios?

L@s profesores... ¿cesarán en su empeño si logran permanecer en un mismo centro y no tener que hacer un tercio de jornada en un municipio y otro tercio en otro distinto?

L@s policías y fuerzas armadas... ¿dejarán sól@s a l@s compañer@s que son expedientad@s por dar un paso al frente y ponerse al lado de sus verdader@s jefes, del pueblo? Hoy soñé que no. Que, las unidades policiales se retiraban y no como táctica psicológica o similar, sino que se retiraban porque se unían en un acto de valentía. El uniforme no lleva el valor incorporado, no es "mágico", pero seguro que en la mayoría de esos uniformes no se esconde la cobardía.

Me hago estas preguntas porque todas ellas esconden otras más profundas, ¿qué queremos conseguir? ¿Por qué salimos a la calle? ¿Cuándo pararemos? ¿Cuál es el objetivo? ¿Cuánto estamos dispuest@s a arriesgar? Yo tengo mis respuestas, por supuesto, pero no sé en qué medida son compartidas. Por eso, el 15O fue esperanzador pero no sé hasta qué punto.

¿A dónde quiero llegar yo con estas preguntas? Pues sólo quiero recordar que hay gente que muere cada día, que ya la había antes de la crisis, antes del 15M, antes del 15O y la sigue habiendo. Hasta ahora parece que tenemos que caer en picado para tomar medidas, y las medidas... ¿buscará un cambio de este sistema demoledor? o ¿buscarán tan sólo nuestro bienestar sin mirar a costa de qué o quiénes se consiguen?

Muchas preguntas, espero que os animéis al menos tanto como en las anteriores entradas para hacer algún comentario.