EL GRAN DEBATE PPSOE: NO SOMOS LO MISMO. JESÚS MARTÍN OSTIOS

EL GRAN DEBATE. NO SOMOS LO MISMO.

Como niños pequeños PP y PSOE se lanza ataques. ¿Motivo de esos ataques? ¿Próximas elecciones? ¿Reforma constitucional? ¿Legalización de Bildu? ¿Corrupción económica? No, no lo han adivinado. El rifirrafe de hoy era sobre ideologías. Unos y otros decían que PP y PSOE no eran lo mismo.

Rubalcaba y Chacón lo defendían en un acto en Barcelona. Lo mismo hacía Arenas en otro acto por la geografía española. Arenas señalaba que cuando el PP gobernara, algo que daba ya por hecho, no iba a haber reformas. ¡Hombre! Normal, ¡si las reformas ya se las ha hecho Zapatero!. ¿O la reforma laboral y de las pensiones son reformas socialistas? En algo si se pusieron de acuerdo, en la reforma de la Constitución para poner un tope a la deuda. Pero en el resto, Zapatero ya les hizo el trabajo. Para rizar el ridículo añadía Arenas que cuando gobiernen no van a tocar ni educación ni sanidad. ¿Se cree que somos tontos? ¿No ha visto los recortes de Esperanza Aguirre en Madrid o los de Cospedal en Castilla la Mancha? Aunque bueno, dice Esperanza Aguirre que esos no son recortes.

A este chiste se une Aznar quien hace unos días en París se preguntaba por qué la crisis económica mundial había afectado más a España que a otros países. ¿A qué no saben a quién le echaba la culpa? Evidentemente al señor Zapatero. El pobre se las está llevando de todos lados. Aunque Zapatero tiene parte de culpa, es evidente que la actual crisis económica ha afectado más a nuestro país porque ninguno de los gobiernos de la democracia ha sabido poner freno al ladrillo. Ninguno de los gobiernos democráticos ha sido capaz de generar otro modelo productivo diferente al del ladrillo y el turismo. Pero parece que aquí la autocrítica no existe. Al caso, me decía el otro día la secretaría de un político conocido de nuestro país cuando le solicitaba una entrevista para Utopía que algunas preguntas que le había mando previamente por correo electrónico no se las podía hacer. Unas de ellas era la de la autocrítica. ¿No pueden hacer autocrítica? ¿No pueden hablar de determinados temas? Mal vamos cuando desde la clase política determinados temas no pueden ser tratados con voz propia y si con las consignas del partido de turno.