HAY MALTRATO Y VIOLENCIA NO SÓLO CONTRA LA MUJER
Pese a la propaganda ideológica en los medios de comunicación, los estudios revelan que no es el maltrato contra la mujer el más común ni el más extendido. Ninguna violencia tiene justificación. ¡Todas son detestables, censurables, aborrecibles y odiosas! Pero debemos conocer la verdad de lo que sucede porque es de justicia, y porque se oculta.
Seres humanos e iguales en derechos somos todos, desde el embrión que es un ser humano en etapa naciente, al niño que es un ser humano en etapa de infancia, al joven que es un ser humano en etapa adolescente, a la mujer y al hombre en fase adulta, y las personas de más de 65 años, mayores, 3ª edad y ancianos. Ni la edad, ni la estatura, ni el sexo, ni siquiera la salud o la enfermedad, ni el color de la piel ni las creencias pueden justificar la discriminación o la violencia de ningún tipo. Toda violencia, y no solo la machista, es un atentado contra los derechos fundamentales de otro ser humano.
Estadísticamente la violencia contra el embrión, con resultado de muerte, es con diferencia la mayor, tanto en número cuanto por los efectos devastadores. El hecho de que pueda quedar amparada legalmente por la ley del aborto, no deja ni de ser violencia ni de tener fatales consecuencias para el pequeño ser humano indefenso.
Casualmente, la violencia descrita anteriormente, no se considera agresión contra la mujer. Y ella tampoco lo denuncia como tal. Pero para que la agresión fetal pueda producirse en la mujer embarazada, debe mediar su consentimiento. Al varón, en este caso se le ignora.
En la fase siguiente, la Infantil, según los estudios, “prevalece la condición femenina del agresor” (según el estudio del Centro Reina Sofía: 56,5% agresor femenino, 43,5 varones). Este tipo de violencia es más acusado en familias monoparentales. “Existe una estrecha relación entre ambos factores, dado que en las familias monoparentales es la mujer quien, en la mayoría de los casos, tiene los hijos a su cargo”. Y lo que es peor, según la Federación para la Prevención del Maltrato Infantil (FAPMI), “el 80% de los casos permanece oculto”. Podría haber de 1000 a 6000 niños maltratados, por millón.
Dicen los expertos que más allá del castigo, “cuando los niños han experimentado una paternidad sensible, cálida, cognitiva, estimulante , muestran un funcionamiento cognitivo, unos resultados académicos y una adaptación social mayores” ( E. Punset).
El siguiente, paso, la violencia en personas mayores de 17 años, el estudio refuta el planteamiento de ‘violencia de género’ en el seno de la familia, “desplazan el eje agresor-víctima, de la caracterización hombre-mujer, a otra más compleja, fuerte-débil + estabilidad familiar”, según el estudio del Instituto de Estudios del Capital Social (INCAS). La desestructuración familiar y el desamor, en muchos casos, desembocan en violencia.
La razón básica, (nunca justificación) en el 45% de los casos de feminicidio, es la ruptura de la relación. Otro dato: se produce 9 veces más en parejas de hecho que en matrimonios; y de 5 a 9 veces más sobre mujeres inmigrantes que autóctonas. El agresor hombre, es inmigrante en una proporción de 4 a 8 veces superior al autóctono. Con otras palabras, el estudio de los feminicidios “conducen a una misma razón: las parejas de hecho incurren en el feminicidio en mayor medida porque su estabilidad es menor y la ruptura más frecuente”. Por su parte “los inmigrantes adoptan la cohabitación y la pareja de hecho en mayor medida que los autóctonos y ello conduce a su vez a una mayor proporción de rupturas”.
La violencia contra la mujer, se estima en 2.100 casos por millón, según el estudio de INCAS, basado en datos del CIS.
Y llegamos a los ancianos, el colectivo que sufre en sus carnes un mayor maltrato en el ámbito familiar. Esta violencia se ignora, no se denuncia. Va en aumento. Según las conclusiones del 30º Congreso de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria, celebrado en Valencia entre el 15 y 18 de junio de 2010, se hablaba de 50.000 casos por millón. Una cifra aterradora que produce escalofrío.
Según el Fórum Libertas, la violencia contra los ancianos está mucho más extendida que la que se da contra la mujer. Es un colectivo indefenso, que ni se queja, ni sabe a dónde acudir, pero la violencia “crece con la edad de la víctima y su grado de dependencia, en una relación fuerte-débil”. Tampoco es un colectivo que cuente con muchos recursos para contratar servicios, y se encuentra a merced de la familia. La sociedad en general, tiene especial sensibilidad para denunciar la violencia infantil (si la conoce), o el maltrato a la mujer, pero en el caso de los ancianos como si no les importara, como si los ancianos no sufrieran. En cualquier caso, según el estudio, tanto en los niños como en los ancianos, precisamente por su indefensión se oculta y minusvalora. No existen políticas de sensibilización o prevención. El estudio concluye con este mensaje desolador: “la violencia contra los ancianos no parece interesar a nadie”.
No parece que la sociedad española sea consciente del cambio demográfico, pero la población ha envejecido. Los mayores requieren cada vez más cuidados y más afecto. ¿Por qué no dárselos? Todos los que sufren necesitan un rayo de esperanza.
Y la escarlatina que ha sufrido mi hijo, ya extinguida, también es maltrato femenino de las mujeres inmigrantes que la han traído de sus países. Y la abundancia de contagio de piojos también es ese mismo tipo de violencia de las inmigrantes hacia los varones. Y podría seguir... Pero no. ¿Para qué?
ResponderEliminarPERO SIN ÁNIMO DE MALTRATAR MÁS BIEN DE LLEVAR A REFLEXIÓN A UN SER HUMANO QUE PIENSA, PARA Mí QUE, EL TEXTO TIENE CIERTa IMPREGNACIÓN RACISTA Y MACHISTA. DOS LACRAS CON LAS MISMAS RAÍCES PROFUNDAMENTE ARRAIGADAS EN LOS HOMBRES (AQUÍ ESTOY UTILIZANDO EL MASCULINO GENÉRICO)
ResponderEliminarESTE COMENTARIO ES DE A.R. y lo incluyo por su claridad de ideas.
ResponderEliminarPufff...aquí hay para un análisis profundo. Primera perla que me encuentro ''la violencia contra el embrión, con resultado de muerte, es con diferencia la mayor'' (aquí ya pienso que este tío es del opus o alguna plataforma antiabortista que, como no tiene útero pero sí pene, puede decir lo que se le plazca sin más)...luego va el listo y suelta ''En la fase siguiente, la Infantil prevalece la condición femenina del agresor. Este tipo de violencia es más acusado en familias monoparentales. “Existe una estrecha relación entre ambos factores, dado que en las familias monoparentales es la mujer quien, en la mayoría de los casos, tiene los hijos a su cargo”'', vamos, que para este sujeto una mujer sola no es capaz de criar a un hijo ( es que alucino), seguimos ''las parejas de hecho incurren en el feminicidio en mayor medida porque su estabilidad es menor y la ruptura más frecuente'', es decir que si te casas como es menos probable que te divorcies no te matarán, pero eso no contempla los maltratos, o si señor Belmonte??, total que este tío es uno de derechas, del opus, que opina que las mujeres que ejercen su derecho a abortar están cometiendo violencia contra el embrión ( y encima sin contar con el varón omnipotente), que las madres libertinas son culpables de la violencia infantil y que matan más a las mujeres porque no se casan y se casi arrejuntan (que blasfemia, por dios). Total, otro panoli que busca, encuentra y corta-pega datos, dando explicaciones que se adaptan a su opinión. Otro del club '' supremacía del pene'' quitando hierro al problema de la violencia de género.