GRIPE “A”: ÚLTIMA MANIFESTACIÓN DE LOCURA HUMANA. EMILIO RUIZ


¿Cuánto hemos gastado (y vamos a seguir gastando) en vacunas para prevenir una posible epidemia de gripe A en nuestro entorno?.

¿Cuánto hemos gastado en vacunas para prevenir o combatir la malaria, la enfermedad del sueño, la enfermedad del chagas... en zonas ajenas a nuestro particular paraíso terrenal?. ¿Cuánto hemos gastado en combatir la hambruna en el mundo?.


¿Cuántas personas han fallecido por gripe A durante el último invierno austral?. ¿Cuántas personas han fallecido por hambre durante ese mismo tiempo?.

Se nos dice que no había, que no hay dinero público para aumentar la ayuda al tercer mundo pero, de pronto, sí ha habido un montón de dinero para prevenir en el primer mundo el posible contagio por virus de la gripe A.

Gastamos grandes cantidades de dinero en prevenir una posible expansión de la nueva gripe A; pero somos incapaces de aportar una pequeña cantidad para erradicar p. ej. el hambre en el mundo. ¿Qué está siendo más mortal, la nueva gripe A o la desnutrición existente en parte de nuestro mundo?. ¿Con qué orden de prioridad y presupuesto habría que atender ambos casos?. Esto es una auténtica locura. ¡Qué suerte haber nacido en el primer mundo!. ¡Qué pena ignorar al tercer mundo!. Qué fácil resulta escribir esto desde esta orilla.

Podemos añadir otro ejemplo distinto, por si acaso no bastaba con la muestra anterior: ¿Cuánto dinero público se ha inyectado a bancos y otras empresas privadas para combatir los efectos de nuestra incómoda crisis económica? (por cierto, crisis ésta resultante de nuestro exclusivo decidir/actuar). ¿Y cuánto para combatir la auténtica crisis existencial-vital del tercer mundo? (por cierto, crisis ésta que nada tiene que ver con su decidir/actuar). El primer mundo somos responsable de ambas crisis pero, éticamente, la forma de atajarlas es inadmisible, increíble, bárbara...

¿Cómo es posible esto a estas alturas?. Seguramente nunca tan pocos han perjudicado tanto a tantos.

Todo esto se hace con dinero público, con tu dinero, con mi dinero. ¿El gestor público hace el mejor uso y reparto de ese dinero que aportamos entre todos/as?. ¿Cuántas muertes podríamos estar evitando si parte de ese dinero se destinase a enviar los alimentos y las vacunas que necesitan en el tercer mundo?.

Si miramos hacia atrás en la historia, nos encontramos con muchos momentos en los que nos preguntamos cómo no se hizo algo más para salvar a más personas (durante el holocausto nazi, durante la represión franquista en nuestro país...). Si mirásemos al presente debiéramos preguntarnos si podríamos hacer mucho más de lo que hacemos por mucha más gente de la que creemos. No podemos actuar en el pasado pero no hay excusa válida para no hacerlo en el presente.

Si no progresamos todos, el progreso es ficticio. Las personas más desfavorecidas se levantarán contra nuestra abundancia y nuestros excesos. No tienen nada que perder y sí mucho que ganar. Invadirán nuestro particular mundo donde todo es opulencia. Nuestra burbuja estallará y nuestras vergüenzas saltarán a la vista.

¿Porqué no compartimos la parte de progreso, bienestar, felicidad... que les corresponde?. Si ayudamos, nos ayudamos. Pero también si olvidamos, nos olvidamos; si sometemos, nos sometemos... No podemos ignorar la trascendencia de nuestro actuar; no podemos ignorar lo que provocamos más allá. Lo que hacemos afecta y nos afecta. Sólo progresando todos/as puede progresar nuestro mundo.

La gripe A es la más reciente manifestación de la gran locura y el extremo egoísmo en que vivimos la parte dominante de la humanidad. Queremos lo más y lo mejor para nosostros/as aunque para los demás no quede nada, ni siquiera la posibilidad de sobrevivir.

A lo largo de la historia ha habido momentos muy significativos de la locura que a veces invade y domina al ser humano. La fabricación y el almacenamiento masivo de vacunas contra la gripe A por parte del primer mundo es otra manifestación de gran locura humana que pasará a engrosar ese fatídico historial; y es, sobre todo, un magnífico insulto a quienes mueren por causas mucho más simples y conocidas que se podrían combatir y contrarrestar si el primer mundo quisiese destinar una partida presupuestaria a ello.

En los próximos meses, ¿cuántas personas morirán por gripe A en el primer mundo?. ¿Y cuántas morirán, p. ej. por hambre, en el tercer mundo?. ¿Lo estamos haciendo bien?.

Busca en tu interior la respuesta a estas cuestiones. Manifiéstate y actúa en consecuencia. Haz que tu voz se oiga y que algunos de tus actos te acrediten. Y si lo consideras necesario, tratemos de provocar un cambio en el rumbo establecido. Tratemos de alcanzar un poco de cordura aún dentro de esta locura humana en que estamos inmersos y a la que todos/as colaboramos. Por el bien de tantos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

"No podemos actuar en el pasado pero no hay excusa válida para no hacerlo en el presente".Me encanta la frase. Si podemos hacer algo y hay que intentarlo. Enhorabuena por el artículo.
Jesús Martín

Anónimo dijo...

"La utopía es el límite que se ha de hayar presente en nuestro mundo si lo que queremos es erradicar todos lo males" La frase es de Tomás Moro

Anónimo dijo...

Eres hora de despertar ya.... vamos a intentar que la gente piense por si mismo...

Todos podemos