DE NIEVE Y DE ALAZÁN
Esta mano que ahoga las vocales,
este canto que llueve hacia el
olvido,
día en ruina, doncel reconvertido
a la fe del que adora lacrimales.
Será pavor, neblina en los portales,
la viuda que tortura a su marido,
el pájaro que orina, nido a nido,
sus tiernas componendas decimales.