ESPECIAL JUSTICIA EN ESPAÑA


ENTREVISTAMOS A TRES PROFESORES UNIVERSITARIOS SOBRE LA SITUACIÓN DE LA JUSTICIA EN ESPAÑA. ÁNGEL SÁNCHEZ BLANCO,
JUAN JOSÉ BONILLA SÁNCHEZ Y ANTONIO J QUESADA HABLAN PARA UTOPÍA DE LOS PRINCIPALES PROBLEMAS DE LA JUSTICIA EN NUESTRO PAÍS.



ENTREVISTA ÁNGEL SÁNCHEZ BLANCO.
Ángel Sánchez Blanco es Catedrático de Derecho Administrativo de la Universidad de Málaga


- La justicia española está recibiendo muchas críticas, ¿cómo valora usted la situación actual de la justicia en nuestro país?



La justicia española recibe menos críticas de lo que pudiera provocar un análisis objetivo de la situación, pero el conjunto de la sociedad y sus representantes políticos no parecen conscientes de las implicaciones del mal estado del Poder Judicial para el Estado de Derecho y, en este contexto, es especialmente preocupante la resignación de los Colegios de Abogados y de Procuradores, como colectivos profesionales especialmente afectados, sin olvidar a las propias Facultades de Derecho, que parecen integrar, en la normalidad, el anormal funcionamiento de la justicia en España.

-¿Cuál es a su juicio el principal problema de la justicia hoy en día?

El problema de fondo de la ineficaz organización judicial es político; los cargos públicos del Estado Español, desde los Alcaldes al Presidente del Gobierno, están muy satisfechos por la carencia de control de sus actuaciones por los órganos judiciales. Las sentencias de los Tribunales de Justicia las suele recibir el sucesor de la autoridad que genera el acto objeto de sentencia y, por añadidura, disponen de efectivos recursos para demorar o evitar la efectiva ejecución del fallo de las sentencias.

-Una de las mayores críticas se refiere a la independencia del poder judicial y la intromisión de los políticos en la misma, por ejemplo a la hora de determinados nombramientos ¿Cree usted que el Poder Judicial es realmente independiente?

El Poder Judicial del Estado Español no es independiente. El autogobierno del Poder Judicial mediante el Consejo General del Poder Judicial ha sido sustituido por la mediatización de las ejecutivas de los partidos políticos en la designación de los miembros del Consejo y, como maliciosos complementos, confluyen, el Ministerio de Justicia y las área de justicia de las Consejerías de las Comunidades Autónomas, que controlan lo que el Tribunal Constitucional ha calificado como la Administración de la Administración de Justicia, mediante las dotaciones, discrecionales, de medios materiales y personales necesarios para el servicio de la Administración de Justicia.

En España, el aún emergente Estado de Derecho, no ha asimilado el principio de División de Poderes y todavía esta condicionado por el criterio autocrático de “Unidad de Poder y División de Funciones”, consagrado por la Ley de Cortes de 1942 y que como muestra la realidad institucional, permanece “atado y bien atado” de modo que, transcurrido el treinta aniversario de la Constitución de 1978, esta aún vigente, como muestran las potentes conexiones de los Poderes Ejecutivos, central y autonómicos, sobre el Poder Judicial.


-¿Está politizado el CGPJ- Consejo General del Poder Judicial? ¿Modificaría su sistema de elección?

Es obvia la mediatización política del Consejo General del Poder Judicial por unos partidos tributarios del marketing de sus siglas y carentes de sentido de Estado, y es necesario reconducir el Gobierno del Poder Judicial a los propios Jueces y Magistrados con la incorporación de la representación de los Secretarios Judiciales y de la Abogacía.

-Si de usted dependiera, ¿Qué reformaría?

Como complemento a la modificación del sistema de elección de los miembros del Consejo General de Poder Judicial, es relevante la dotación de la adecuada planta judicial para establecer la adecuada correspondencia de medios a fines, entre el número de órganos judiciales y el número de demandas formalizadas.

También es relevante racionalizar el procedimiento de acceso a la judicatura y a la secretaría judicial, mediante el equilibrio entre la experiencia personal y profesional y los conocimientos teóricos, con garantía de la objetividad en el acceso y en el desempeño de las funciones judiciales y de secretaría, lo que implica prescindir de la perturbadora figura de los sustitutos, en calidad de otra preocupante disfunción jurisdiccional y no es menos relevante la necesidad de informatizar la gestión procesal.
Un aspecto también relevante en la reforma jurisdiccional requiere colegiar la decisión del juez unipersonal cuando la decisión afecta a la perdida de la libertad.

-¿Cree que servirá de algo la NOJ- Nueva Oficina Judicial?

La Oficina Judicial solo ofrece respuesta a dos aspectos: el primero, contribuir a resolver la inasimilable situación de que abogados y procurado4res tengan que imprimir sus documentos informáticos para tramitarlos ante los órganos judiciales y, segundo, facilita la referida gestión procesal, con aportación a la importantes funciones de la Secretaría Judicial de medios organizativos y operativos para poder comenzar a ofrecer respuesta a la acumulación de causas judiciales. No obstante, la Oficina Judicial, no puede resolver los graves problemas estructurales de la Administración de Justicia.

-Uno de los temas más recientes y polémicos ha sido el caso Garzón ¿qué opinión le merece lo acontecido en torno al juez Garzón?

El caso del magistrado al que ustedes se refieren, con doble referencia a su apellido, es una simple anécdota en el lamentable estado del Poder Judicial del Estado Español.


-¿Qué opina de la situación en la que se encuentra Garzón?

La situación del referido magistrado ha sido siempre de privilegio y, por ello, injustificada, entre otras razones por encuadrarse, su indubitada fama, en la vinculación, durante más años de los razonables para su edad, como juez de instrucción, en la Audiencia Nacional, de la que no se puede ignorarse que fue creada en las postrimerías del régimen preconstitucional, Real Decreto-Ley 1/1977, como jurisdicción especial sucedánea del extinto Tribunal de Orden Público, con todos los privilegios con la que se la dotó en origen, y que el sistema constitucional ha mantenido, sin reparar en su asistematismo jurídico e institucional.
A mayor abundamiento, los privilegios del referido magistrado no han estado acompañados de la calidad en sus instrucciones, realizadas, en actuaciones, sin duda alguna, de enorme trascendencia, pero que requieren integrar el dato, relevante, de que el resultado de muchas de sus instrucciones no ha podido ser homologado por sus compañeros magistrados de Sala de la Audiencia Nacional.


ENTREVISTA JUAN JOSÉ BONILLA SÁNCHEZ.

Juan José Bonilla Sánchez es Abogado en ejercicio hace más de 20 años, Doctor en Derecho y Profesor de Derecho Constitucional de la Universidad de Sevilla. Ha escrito dos libros: La responsabilidad médica extracontractual (Laborum, 2004) y Personas y derechos de la personalidad (Reus, 2010) y publicado numerosos artículos en Revistas sobre daños médicos; honor, intimidad, e imagen; el recurso de amparo; la objeción de conciencia ante el aborto, etc.

La justicia española está recibiendo muchas, ¿cómo valora usted la situación actual de la justicia en nuestro país?
Ahora mismo es lenta, obsoleta y costosa de alcanzar.

¿Cuál es a su juicio el principal problema de la justicia hoy en día?

Voy a enumerar unos cuantos: La excesiva documentación; la escasa informatización e interconexión entre los Tribunales los demás poderes del Estado y el abuso de multitud de mecanismos dilatorios por las partes y sus representantes procesales. Así las cosas no puede extrañarnos que una instrucción penal se alargue cuatro años y su fase decisoria otros tantos.

Una de las mayores críticas se refiere a la independencia del poder judicial y la intromisión de los políticos en la misma, por ejemplo a la hora de determinados nombramientos ¿Cree usted que el Poder Judicial es realmente independiente?

El poder judicial está concebido para ser independiente orgánica y funcionalmente. Es el menos legitimado democráticamente, ya que sus titulares son profesionales y su única sumisión lo es a la ley, que interpretan y aplican con exclusividad. Como colofón, se garantiza su asepsia procesal, el necesario alejamiento de las partes y del objeto litigioso que han de resolver. Otra cosa es que su órgano de gobierno sea de extracción política.

En línea con la anterior cuestión ¿Está politizado el CGPJ- Consejo General del Poder Judicial?

Todos somos políticos porque todos estamos insertos en el Estado que es una forma de organización política. Los vocales del Consejo son elegidos por las Cortes por una mayoría cualificada para democratizar el poder, para acercarlo al pueblo y tampoco olvidemos, que tres quintos de sus miembros son propuestos por los propios Jueces, sean progresistas, conservadores o independientes.

¿Modificaría su sistema de elección?

Si el nombramiento de los Consejeros se encomendara a los propios Jueces a lo mejor aumentaba la independencia “política”, pero disminuiría su legitimación democrática y se favorecería el corporativismo.

Lo importante es recalcar que el Consejo no es “el poder” y que sólo se ocupa de la selección, inspección y disciplina de las piezas del poder.

Si de usted dependiera, ¿Qué reformaría?

-La tardanza y formalismo en la comunicación y publicidad de las resoluciones judiciales.
--Establecería un control previo de admisión de los recursos por motivos formales o puramente dilatorios y de las nulidades.

-Facilitaría fórmulas claras para la reparación del daño causado por el funcionamiento anormal, el error o la negligencia de todos los que intervienen en la Administración de Justicia.

-Convertiría a los Tribunales Superiores de Justicia en la última instancia en derecho autonómico y en materia de garantías procesales.

-Reduciría los jueces sustitutos y suplentes y daría mayor formación a los profesionales fomentando la especialización y la inamovilidad.

-Aumentaría las competencias a los Secretarios Judiciales en los trámites en que no sea preceptiva la intervención del Juez, ejecución, jurisdicción voluntaria, etc.

-Crearía un puesto de informático en cada Tribunal para que se ocupe de las tareas y problemas técnicos

-Simplificaría y formaría al personal al servicio de la Administración de Justicia ha de teórica, informática y, sobretodo, prácticamente.

¿Cree que servirá de algo la NOJ- Nueva Oficina Judicial?

A los Jueces hay que dejarles juzgar y despojarles de todas las demás tareas. Convendría, para ello, que la Oficina Judicial abriera todo el día, mañana y tarde y que sus medios y bases de datos jurídicos y económicos no fueran a la zaga de los que disponen la Universidad o la Agencia Tributaria.

Uno de los temas más recientes y polémicos ha sido el caso Garzón ¿qué opinión le merece lo acontecido en torno al juez Garzón?

Su encausamiento evidencia que el juzgador no es inmune a la ley que interpreta y aplica asiduamente, aunque sea Consejero de la Corte Penal Internacional.

Creo que el Tribunal Supremo tiene que dejar al margen las consideraciones políticas de unos y de otros sobre su labor desempeñada en la Audiencia Nacional así como sobre la relevancia pública de procesos que, con menor o mayor fortuna, ha instruido y centrarse en razonar si algunas de sus resoluciones fueron arbitrarias e injustas a sabiendas.




ENTREVISTA ANTONIO J. QUESADA.
Antonio J. Quesada es Doctor de Derecho Civil, con múltiples publicacines científicas y un CV literario muy amplio.

La justicia española está recibiendo muchas, ¿cómo valora usted la situación actual de la justicia en nuestro país?

Es evidente que la Administración de Justicia, como la Administración en general, vive un proceso de grave ralentización en su labor. Es una pena, pues la preparación de los funcionarios es elevada, en líneas generales, pero el sistema parece tener fallas.

¿Cuál es a su juicio el principal problema de la justicia hoy en día?

La tardanza a la hora de tomar decisiones. Un buen funcionamiento de la Administración de justicia desincentiva la autotutela, es básico, y no siempre se ve.

Una de las mayores críticas se refiere a la independencia del poder judicial y la intromisión de los políticos en la misma, por ejemplo a la hora de determinados nombramientos ¿Cree usted que el Poder Judicial es realmente independiente?


Así se diseña y así lo es a la hora de tomar decisiones, pero no cabe duda de que el órgano de gestión máxima, el CGPJ, está elegido del modo en que lo está y eso distorsiona su tarea, al menos de cara al gran público.

En línea con la anterior cuestión ¿Está politizado el CGPJ- Consejo General del Poder Judicial? ¿Modificaría su sistema de elección?

Sí, considero que está excesivamente teñido de política, y la prensa juega mucho con eso: a veces parece estarse ante unos cuartos de final de un mundial, y no ante una decisión jurídica.

Si de usted dependiera, ¿Qué reformaría?

Intentaría que ese juego político que parece respirarse (no sé si real o inducido) en órganos como el TC o el CGPJ, se limitase al mínimo. Es inevitable que un juez tenga ideas político-sociales, como ciudadano que es, y que ellas puedan influir a la hora de interpretar normas cuando éstas lo permitan (conceptos jurídicos indeterminados), pero no me gusta esa calificación de juez
conservador-progresista, que parece predisponer ya en un sentido la tarea judicial.

¿Cree que servirá de algo la NOJ- Nueva Oficina Judicial?

Confiemos en que sí.

Uno de los temas más recientes y polémicos ha sido el caso Garzón ¿qué opinión le merece lo acontecido en torno al juez Garzón?

Es una consecuencia de convertir en espectáculo el mundo jurídico. En su caso deben juzgarse varios asuntos jurídicos, pero todo está teñido de lectura política.

¿Qué opina de la situación en la que se encuentra Garzón?

Creo que hay que juzgar unos hechos, sin más. Todo lo que se oye por las distintas hinchadas está de más. Se juzgan unos hechos, no una persona, por más que nos guste o no esa persona.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Desde mi profunda ignorancia, la situación de la justicia en nuestro país es desastrosa. ¿Cómo se puede explicar la constante intromisión de los políticos? ¿Por qué cargos públicos salen impunes o con penas mínimas?

Anónimo dijo...

Desde mi profunda ignorancia, la situación de la justicia en nuestro país es desastrosa. ¿Cómo se puede explicar la constante intromisión de los políticos? ¿Por qué cargos públicos salen impunes o con penas mínimas?

MARIA ÁGUILA BOGE dijo...

Nunca la Justicia española ha merecido más reproches que ahora.
Nos ha llevado al caos presente, y seguiremos cayendo hasta no podernos levantar

Anónimo dijo...

La justicia no vale nada , lo estamos viendo .

Anónimo dijo...

Lo vemos en sentencias , opiniones de desprecio , videos de burla , abogados que no creen en ella , no estan de acuerdo con lo que se hace ... En Segovia se ha defendido a un asesino , a quien agredió e intentó asesinar , entre otras cosas , mientras esto siga , habrá quien no

Anónimo dijo...

denuncie aunque muera . Vemos en casos todo esto . En vez de tanta palabrería barata por parte de politicos , por ejemplo se debería hacer algo porque en Segovia hay quien no quiere que un , ( no voy a llamar juez ) , siga en magistratura y hay esta .

Anónimo dijo...

Gente de las fuerzas de seguridad dicen que los delincuentes entran y salen del juzgado como Pedro por su casa . Por algo será

MARIA ÁGUILA BOGE dijo...

Me pregunto cómo ha llegado mi comentario crítico a este blog. Curiosamente entre todos los anónimos. Se nota que no tengo nada que ocultar. Saludos.

Anónimo dijo...

La gente tiene derecho a no dar más datos , no quiere decir que haya algo que ocultar . Que con la escoria de justicia que hay estaría en su derecho . Ten educación y no critiques . Si tu has dado datos , es tu problema , nadie te obligó .

COLABORADORES dijo...

Hola Maria José, soy el gestor de este blog, si quieres que borremos el comentario solo tienes que enviarme un mail a martinostios@hotmail.com. Un saludo.

MARIA ÁGUILA BOGE dijo...

Yo doy datos porque no tengo nada que ocultar.