NO TE RINDAS. MARIO BENEDETTI
No te rindas, aún estás a tiempo
De alcanzar y comenzar de nuevo,
Aceptar tus sombras,
Enterrar tus miedos,
Liberar el lastre,
Retomar el vuelo.
Últimamente, aquí, hasta el más profano saben que el cuerpo es importante. Antes y después de muerto. Antes, porque forma parte indisoluble de la vida temporal. Y después, por lo que fue y por lo que puede revelar. El cuerpo de un secuestrado, robado o desaparecido, es esencial para su familia. Si además se sospecha o se sabe que ha sido violado, maltratado y muerto, encontrar el cuerpo del ser querido es una obsesión y un tormento tan profundo y largo como las horas del día y de la noche. Pero además, jurídicamente, es la mayor prueba del delito. Para enjuiciar al culpable o culpables es importante encontrar “el cuerpo del delito”. Por eso, los criminales, intentan hacerlo desaparecer.