CONTRA CORRIENTE
El salmón es una especie única. Tiene que nadar contra corriente cuando llega su época de depositar los huevos para el nacimiento de una nueva generación. Vuelve al mismo lugar en donde sus antecesores desovaron. Y para ello tienen que nadar contra corriente con un gran esfuerzo, sin comer y luchando contra el caudal enorme del rio. Los padres mueren al desovar y los jóvenes tardan un promedio de dos años en volver a descender al mar.
Cada año son menos los salmones que retornan a los ríos españoles, y más graves los problemas para que se recupere la especie, esto está provocando que las poblaciones de esta especie, estén especialmente amenazadas por factores como la modificación de su entorno, como presas por ejemplo, por contaminación, sobrepesca y degradación de su hábitat.
No es fácil nadar contra corriente, ni tan siquiera para un pez. Es más fácil hacerlo a favor y dejarse llevar por la fuerza del rio.
Se necesita ahínco y firmeza en tus creencias para atreverse a soñar y a querer continuar navegando con tantos obstáculos. Es necesario constancia y persistencia en tus posturas para vivir en un entorno tan suicida, en busca de la verdad y de lo justo. Es fundamental tener tesón y ser muy tenaz en tu actitud para llamar a las cosas por su nombre y no con eufemismos.
Tal vez así, nuestra especie y su esencia no corran el riesgo de desaparición Tal vez así, seamos capaces de cambiar lo que no nos gusta del sistema. Si de verdad, hay algo en él, que no nos guste o que queramos cambiar, claro.
2 comentarios:
Aunque sea duro, mejor es nadar contra corriente que no dejarse llevar, pues sabemos que si nos dejamos llevar, el "efecto iguazú" acabará con nosotr@s.
(La idea está sacada del documental del mismo nombre, que trata sobre los trabajadores de Sintel, en ese documental, uno de ellos, apostado en la Castellana por aquellos días, nos habla de cómo dejándote llevar no alcanzas a ver hacia dónde te dirijes, hasta que te encuentras precipitándote hacia las cataratas y tratas de alertar a l@s demás).
Merece la pena ver el documental, pues con el 15M a veces nos olvidamos de l@s que nos han precedido, de lo que arriesgaron, de lo que reclamaban y lo que finalmente consiguieron. Así podremos comparar un poquito con perspectiva.
Pues si, pero esperemos que nadar contra corriene deje de ser tan difícil y peligroso en este pais. Un saludo.
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