REFORMA DE LA NEGOCIACIÓN COLECTIVA VS ACAMPADAS SÍ O NO. ANTONIO CABELLO

15 M, ACAMPADAS Y CONVENIOS COLECTIVOS
Mientras en las plazas de media España andamos deliberando acerca de las acampadas sí o acampadas no, el Gobierno prepara un decreto ley para regular la negociación en los convenios colectivos. Estamos poniendo en peligro la batalla de la opinión pública que gracias a las justas denuncias y a la manera pacífica de reclamarlas íbamos ganando.

 Pero se nos empieza a ver como un movimiento estancado y molesto, se empieza a poner de relieve más lo que nos desune y sin entrar a valorar la posible manipulación, una cosa está clara: la acampada es sólo para una minoría, mientras una gran mayoría no puede participar; si son motivo de división, hay que evolucionar para seguir creciendo o podemos morir de éxito.

Entretanto el próximo día 10 se puede dar una vuelta más de tuerca en las condiciones de los trabajadores, y ésta puede ser la definitiva pues se trata de debilitar la fuerza de los convenios colectivos, sobre todo en las pequeñas empresas, para dejar en manos de los empresarios las condiciones y salarios sin que el convenio sectorial pueda servir de referencia. Quizá muchos de los que apoyan el 15M no sean trabajadores o están en paro, pero la amenaza es sobre las condiciones actuales y futuras. No puede ser que mientras esto se nos viene encima, andemos discutiendo si continúan o no las acampadas.

Se ha decidido pasar de partidos y sindicatos, efectivamente han demostrado sobradamente su ineficacia, pero ¿quién presionará al Gobierno para decirle que NO estamos dispuestos a aceptar ningún nuevo ataque a los derechos laborales?

En muchas de las asambleas hemos oído hablar de caminar junto a los trabajadores, ahora es el momento de demostrarlo, para el 19 será tarde y ya que estamos en asamblea permanente nos debe resultar fácil reaccionar con prontitud. ¿Qué motivo más urgente e importante podemos buscar para llegar a la inmensa mayoría de ciudadanos en la columna vertebral de sus intereses y motivos para la indignación? ¿Qué otra causa justifica ahora una movilización nacional para decirle al Gobierno que estamos aquí?


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