Las cifras que vamos conociendo y las
que irán saliendo a la luz, son de juzgado de guardia. No es que España en
general haya sido mal gobernada al igual que las Autonomías, los Ayuntamientos,
las Diputaciones, y las cientos de empresas creadas para descentralizar la
gestión o como tapadera; es que ha sido manipulada por interesados que han
pensado que cada parcela de poder era su finca. Salvo honrosas excepciones, si
estamos donde estamos, es porque la inmensa mayoría de estos gobernantes, lejos
de buscar el bien común de los ciudadanos, nos han estado tomando el pelo y
robando la cartera.
Los ineptos gobernantes, sus cientos de
miles de asesores, sus colocados y recolocados, sus empresas, sus corifeos
“vendedores de humo” desde los medios televisivos, radiofónicos, escritos o
digitales, y las súper revistas ilustradas a todo color para bombo “del jefe”
de turno y del partido, nos han llevado a la ruina. Al borde mismo de la
quiebra. No se salva ningún partido. Habrá actuaciones más o menos
desafortunadas, pero el resultado es para pedir responsabilidades. Después de
muchos coches (400.000 oficiales, casi todos de alta gama), chóferes, comidas
de trabajo, marketing, promesas y corte de periodistas, nos sobran pabellones,
carriles de bici, aeropuertos, y departamentos de objetos perdidos en dichos
aeropuertos cuando ni siquiera hay pasajeros, etc. Empresas afines se han
aprovechado por ser familia, amigos del amigo y del Zar de turno. Y lo hemos
pagado con dinero público.
Quienes así han vivido a costa del
contribuyente, pero -a lo grande y de forma irresponsable-, no pueden seguir en
la política. Siempre con excusas, siempre por nuestro bien nos han metido en un
agujero tan grande que alcanza el 68,5% del PIB. Hay que hacer una ley para que
se conozcan quiénes son y sean inhabilitados para siempre, no por 3 ó 5 años.
Si han dejado al país tan en cueros que tardará 30 años por lo menos en salir
adelante, debe pedírseles todo tipo de responsabilidades, ya que nos han
embargado esos años de vida. No es que el ex presidente del gobierno de la
nación, y los de las otras administraciones públicas hayan estado solos. Las
responsabilidades son de su gobierno, y los sucesivos miembros de gobierno de
forma conjunta. Porque las decisiones son de todos, no del presidente
solamente. Y si se ha rodeado de ineptos, de aprovechados o vividores, todos y
cada uno tienen que estar en el punto de mira de la justicia y de la sociedad.
Porque un desaguisado de este calibre no sucede por generación espontanea.
Ya es hora de que aprendamos todos, que
no se puede gastar más de lo que segaña o se recauda, porque las consecuencias
las pagan los ciudadanos. Ninguna excusa vale porque ya sabemos que son
irresponsables y a dónde nos lleva esa espiral. Habrá que poner coto y darle
solución. Y entonces, a pagar otra vez. Ninguna solución es gratis. La salida
de esta crisis tampoco.
Nos han llevado al precipicio. Deben
responder por qué, cómo, con quien y cuánto. Por sus desproporcionados sueldos,
sus dietas y pensiones y, por haber derrochado, malversado y tomado decisiones
erróneas o de cohecho, se ha dejado de pagar a miles de empresas y proveedores
que han tenido que cerrar o ir directamente al paro, y con los proveedores,
miles de trabajadores. Si no sabían hacer la o con un canuto que lo hubiera
dejado. Pero no, se han aferrado al carnet partidista para vivir y medrar. Y
tienen la desfachatez de hablar de bienestar social. No es posible que hasta un
pueblo de 240 habitantes deba 4.6 millones de euros.
Ni una subvención más a los sindicatos,
ni a los partidos, ni a la patronal. ¡Han sido insaciables, insolidarios e
irresponsables! Que vivan de o con cuotas de los afiliados. A los responsables
políticos un sueldo, y que de ahí cada uno se pague sus caprichos. Que al
partido que haya pedido un préstamo, se le obligue por ley a devolverlo, como
todo hijo de vecino. Nada de enjuagues, o tú me das para que yo te dé. La
justicia igual para todos, incluidas estas asociaciones y partidos. “En el año
2006, el Banco de Santander y la BBK perdonaron al PSOE una deuda de 30
millones de euros. El mismo año, los partidos políticos recibieron 10,6
millones de euros en donaciones privadas, de las cuales el 90% fueron
“anónimas”. Pero no sabemos qué ha pasado en 2007, ni en 2008, ni en 2009, ni
en 2010. No sabemos cuales son los actuales vínculos de los partidos con
empresas y bancos. ¿Por qué? Porque el Tribunal de Cuentas, el órgano encargado
legalmente de supervisar esa financiación, no ha publicado todavía los informes
correspondientes a esos años. ¿Por qué?”
Las cifras de paro son un escándalo
social y un drama humano de proporciones alarmantes. No puede haber justicia
social si mientras ellos han perdido el trabajo, y no tienen con qué alimentar
a sus hijos, los máximos responsables de esa situación siguen “recolocados” o
“enrocados” en la política, o en Naciones Unidas, o de liberados en los
sindicatos. Que se vayan a su casa. Que no sigan dando lecciones desde el
“pedestal de las estatuas”. Los sindicatos, sin pensar que se les acababa el
aire y la libertad han quedado sepultados dulcemente entre millones de euros.
Los trabajadores no se sienten representados por ellos. Tardarán en darse
cuenta… este sistema sindical ha muerto.
La sociedad civil tiene todo el derecho
a reclamar y a pedir leyes que no permitan nunca que esto se repita. A cada
español, sin comerlo ni beberlo, le han endeudado en 15.571 euros. Tenemos
derecho a reclamar. Si se ha desmontando el entramado productivo, contaminado
la justicia y hasta el aire que respiramos, ellos son responsables. No podemos
permitir que siga esta degeneración y esta falta de valores. ¡Cada uno que
juegue a lo que quiera con su dinero, pero el de los demás ni tocarlo!
¡Bastantes impuestos pagamos ya! Hay que replantearse el Estado, las
autonomías, los ayuntamientos, la financiación, y la votación a los candidatos.
No puede ser que haya que recortar en sanidad, educación, investigación y
ayudas a discapacitados y dependientes, porque unos irresponsables se lo hayan
fumado, a veces literalmente (El ex-chófer de Guerrero dice que gastaba al mes
25.000 euros de las ayudas en comprar cocaina). Consentir toda esta podredumbre
o simplemente callar, es convertirse en cómplices. En mi nombre no. “Nunca
mais”. 734.961 millones de deuda total de todas las administraciones españolas
es decir 68,5%del PIB me parece, de verdad, de juzgado de guardia. (Recuerdo,
por si alguno no se sonroja, que equivalen a = 122.287.221.000.000 de las
antiguas pesetas)
Y por favor, para los pocos honrados y
buenos gestores –que los hay-, todo mi respeto.
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