GLOBAL REVOLUTION. DAVID ARMENDÁRIZ NÚÑEZ.

GLOBAL REVOLUTION
Sobran motivos para lanzarse a la calle y luchar por lo que es nuestro. Ayer 15 de octubre, se demostró de nuevo que cada vez son más los que deciden salir en su ciudad y reivindicar un sistema más justo para las personas. En 80 ciudades españolas y cerca de 1.000 en todo el mundo, la gente invadió plazas, calles y avenidas alzando la voz contra este injusto sistema que padecemos.

En Pamplona fuimos cerca de 10.000 personas las que nos juntamos y de forma espontánea paralizamos varias calles con nuestra marcha, tras la manifestación, asamblea participativa donde muchas personas dieron sus opiniones, críticas y propuestas sobre diversos temas. También hubo un pequeño concierto y acampada alrededor del kiosco de la Plaza del Castillo, donde varios compañeros del 15M Pamplona pasaron la noche.

La mayoría de la población de muchísimos países no es que estemos indignados, es más que eso, estamos muy hartos, rabiosos, y sobre todo con unas incontables ganas de derribar este sistema tan asqueroso.

Todavía no comprendo como sigue habiendo tanta gente a la que los ataques del capital y de la clase política le afectan directamente y sin embargo prefieren no salir a la calle y unirse a convocatorias como la de ayer.

¿Como puede haber personas afectadas que no hagan lo más mínimo por cambiar nada? ¿Acaso no hay motivos suficientes para luchar en el día a día por un mundo más justo?

Debemos ser conscientes de a qué nos estamos enfrentando y qué queremos conseguir. Hay personas que todavía necesitan quitarse la venda de los ojos para que puedan darse cuenta del ambiente irrespirable que nos rodea, en España, Europa y otros muchos países del mundo (en general la inmensa mayoría).

Durante esta crisis más que nunca se está viendo la terrible dictadura del capital, las grandes multinacionales, entidades financieras y organismos que son hienas y que quieren pasar por corderos (FMI, BCE, BM, OMC), son quienes desde hace décadas tienen la sartén por el mango, imponiendo su avaricia y oscuros intereses a los políticos y gobernantes de los países. Quienes dirigen, hacen y deshacen y organizan a su antojo este mundo son personas que nadie las ha votado, tienen nombres y apellidos y participan día a día en los centros financieros del mundo entero.

A esto se une el problema de la existencia de una clase política en su mayoría egoísta mezquina y absolutamente distanciada de la sociedad a la que gobierna, que son firmes aliados de los presidentes y grandes accionistas de la banca y del mundillo privado/empresarial.

En lugar de defender y servir al ciudadano, se sirven del pueblo para lucrarse (bochornoso y dantesco el último escándalo de la CAN, con las dietas millonarias que proporcionaban a varios dirigentes políticos de Navarra del UPN y PSN, por sesiones de 2 horas). Quien está en política debería velar por el bien público, por las necesidades de la mayoría de la población, promover una participación ciudadana activa, hacer política a pie de calle que es donde están los problemas del día a día, y en definitiva defender el estado público evitando su destrucción (que es lo que persiguen los liberales y fuerzas de derecha).

Mientras tanto, estamos viendo todos los días un espectáculo lamentable, aquellos políticos esclavos de la banca, a la que no hace mucho inyectaron cifras astronómicas de dinero público para rescatarla, observan impasibles sin mover un músculo como esa banca que recibió millones salidos de las arcas del estado, se dedica a desahuciar a familias enteras dejándolas en la más absoluta de las miserias.

ESTO ES CAPITALISMO Y LIBERALISMO SEÑORES, SOCIALIZAMOS LAS PÉRDIDAS DE LOS TIBURONES Y BUITRES, MIENTRAS ELLOS PRIVATIZAN LOS BENEFICIOS Y TODO LO QUE PUEDEN.

Sigamos saliendo a la calle, participando en nuestros barrios, ciudades, pueblos, siendo consecuentes con nuestro día a día, luchando contra este sistema en la medida que uno pueda en su realidad cotidiana, trabajo, amigos, familia, en la calle, en la universidad, etc. etc.

¡POR LA REVOLUCIÓN GLOBAL CONTRA EL CAPITALISMO!

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