NI
VIOLACIONES LEGÍTIMAS, NI DERECHO A MATAR
En el bar, pasa la vida muy rápido. Mientras algunos toman algo, otros aprovechan
para repasar los titulares de la prensa. La tele está encendida, pero apenas se
escucha. La mayoría de clientes está en la barra, aunque hay algunos sentados
en las mesas. Cuando alguien cree descubrir algo interesante, eleva la voz y
lee en voz alta. Así comienza la tertulia:
-
El congresista republicano Todd Akin ha
dicho en público, que las mujeres
raramente quedan embarazadas de "violaciones legítimas".
-
Ese tío es un cabrón, un violador. Si es legítimo, que se lo hagan a su mujer o
a sus hijas.
-
Claro mujer, ¿cómo se puede decir, ni
aquí ni en EEUU que hay violaciones legítimas?
-
Yo también estaba leyendo eso. Lo que ha
afirmado en una emisora local es
que "es muy raro que una mujer
quede embarazada por una violación legítima porque su cuerpo tiene mecanismos
para cerrarse del todo y prevenir la gestación".
-
De todos modos, ese tío no está bien de la cabeza, está dando alas a los violadores.
-Las
mujeres enseguida saltáis como víboras, ¡a lo mejor tiene algo de razón en lo
que dice!
-Faltaría
más, tú, como hombre, ponte de su parte.
¿Qué razón ni que leche?, como dice
Pilar, que se lo hagan a su hija.
-Un
señor, que estaba sentado en la mesa, ante el cariz que tomaba la polémica, se
quitó las gafas, las dejó sobre el periódico y dijo que, sin entrar a valorar
ni el aspecto médico, ni humano de lo que dijo el congresista, en inglés "legitímate rape" también
puede ser "verdadero". Tal vez
lo que Akin quería decir es que cuando hay "verdadera violación" la
mujer generalmente no se queda embarazada. Traducirlo como "violación
legítima" es poco acertado, podría ser “violación real”, “violación
auténtica”. El que tu bolso, por ejemplo, sea de “cuero auténtico, o cuero
legítimo”, quiere decir que es real, que no es imitación. Nada tiene que ver
con “un derecho”.
-Por
fin alguien que pone un punto de sensatez.
-No
hay, violaciones legitimas, lo que hay
son violaciones reales, ¿le he entendió bien, señor?
-Pues
claro. Aunque lógicamente que haya o no embarazo es otra cosa.
-¡Acabáramos!
¡País de ignorantes, que tragamos todo lo que nos echan!
-
Sí, como esa…
(La
televisión pasaba entonces la foto de una mujer americana embarazadísima).
“La
mujer en esta foto está de 20 semanas Está embarazada de niñas gemelas. No
tendría nada de raro si no fuera porque esta foto fue tomada el miércoles 8 de
agosto mientras ella entraba al Centro Médico de Orlando para abortar a sus
bebés porque no quería tener hijas. Esperó hasta los 5 meses de embarazo para
llevar a cabo este aborto porque quería confirmar el sexo de los bebés. En la
puerta de la clínica fue recibida por activistas pro-vida quien hablaron con
ella y le ofrecieron todo tipo de ayuda que ella rechazó manifestando además
que no tenía ningún problema con llevar a cabo el aborto y que no experimentaba
ningún tipo de compasión por los bebés que llevaba en el vientre y estaba a
punto de matar. Allí es legal”
-¡Y
dale con lo legal! Pero esas niñas han muerto…
-¡Es
ella quien decide, que para eso es su madre…
-No
digas barbaridades, guapa. Era su madre hasta que las llevó al matadero…
-¡Ala, bruto………!
-¡Será
que es mentira…!
-¡Ella
tiene derecho a decidir! En Estados Unidos como aquí, la ley de la interrupción
voluntaria del embarazo existe y está en vigor.
-¡Por
eso no va a ir a la cárcel!
-Pero
tú qué dices de cárcel, estás loco….
-Digo
lo que me da la gana, o es que sólo las
mujeres podéis hablar.
-Las
mujeres progresistas de este país, pueden decir y decidir lo que les da la
gana, porque les ampara la ley, a ver si te enteras.
-Lo de progresistas puede ser una tontería y lo otro un asesinato.
-Pero
¿cómo puedes hablar de asesinato? Si fuera un asesinato, estaría ahora mismo camino de la cárcel o en la
cárcel como el hijo puta del Bretón.
-
Cierto que el Bretón es un asesino, un criminal que ha matado a sus hijos de 2
y 6 años y los ha quemado para
arrebatárselos para siempre su madre. Es tan monstruoso e inhumano que no hay
adjetivo que lo defina. La frialdad de esa alimaña sobrepasa lo comprensible y
lo imaginable. ¡Que se pudra!
-Di
que sí, la cadena perpetua, sería poco para ese animal sin entrañas.
-Yo
creo que en este país hay mucho hipócrita.
-¿A
qué viene ahora eso? ¿Por qué lo dices?
-Porque
hay un criterio unánime de condena al padre de los niños de Córdoba. Yo el
primero. Pero esa mujer ha acabado con sus hijas, y se habla de que es legal,
que ella puede decidir, que hay una ley que lo permite. O sea, que es un derecho.
-¿Y
no es verdad o qué?
-Es
parte de la mentira. Si el padre de Ruth y de José saliera hoy a la calle, sería linchado por el pueblo.
-
Se lo merece, ¿no crees?
-Ha
quitado la vida a sus hijos, con premeditación y alevosía, solo o en compañía
de quien sea. Pero… esa mujer de la barriga ha asesinado a sus hijas, no sola,
pero sí en colaboración de otras personas, médicos y enfermeras, y con
premeditación y alevosía y… no he oído una palabra en defensa de esas niñas
inocentes. O ¿no somos todos iguales ante la ley?
-Es
que no es lo mismo.
-Ambos
han demostrado una mente fría y un corazón de hielo. Claro que no es lo mismo,
faltaría más. Bretón es un psicópata que ha intentado hacer daño a su mujer
haciendo desaparecer a sus hijos, quemándolos a 800 grados, posiblemente
después de haberles dado muerte. Y ella, la de la barriga, -según ustedes- una
adorable madre de familia a quien le encantan los hijos varones y no le importa
hacer desaparecer del mapa de los vivos a sus dos nenas haciéndolas picadillo,
¿Sí o sí? Y como ella, hay miles en España y millones en el mundo, y todos tan
felices. ¡La sociedad tiene que estar enferma! Las vidas no son iguales. Unas
son un tesoro, las otras no valen nada. Ella también sabía lo que hacía, y los
medios para conseguirlo. Eso es alevosía y premeditación. Y sabe que no le va a
pasar nada, que sus hijas morirán y muerto el perro se acabó la rabia. Tenemos
una doble vara de medir, una doble moral, un doble rasero. Uno para nosotros y
otro para los demás. Ante los niños de Córdoba, que la asquerosa televisión nos
ha mostrado diariamente durante 10 meses, dando cancha a ese canalla, sentimos
lástima, dolor por su muerte atroz, y decimos:¡¡Pobre madre!! Y en el otro
caso… ¡el silencio más cobarde! ¡Como si eso fuera lo más natural! ¿Dónde están
esas niñas? ¿A nadie le importan? ¿No se puede investigar el ADN? ¡Qué pena!
¡Qué asco de sociedad! A mí sí me importan y me saca de quicio tanta
hipocresía, y tanta majadería y tanta injusticia amparada en la política, en
los jueces y en el silencio de los cobardes que lo consienten y lo amparan…
-Ya
vale, hombre, déjalo ya…que te va a dar algo…
-Sí,
es que me enciendo. Me tengo que ir, pero… no es justo. Cuando no defendemos
nuestros derechos y los derechos de los demás, perdemos la dignidad y la
conciencia. ¡Nuestro silencio debería empezar a preocuparnos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario