¿PERO QUÉ ESTÁ PASANDO AQUÍ? CARLO FONTÁN

¿QUÉ ESTÁ PASANDO AQUÍ?

Si no nos perdemos en el laberinto de información que nos domina, en el fondo, el sistema que se está utilizando para hundir Europa es sencillo. Una considerable parte del capital financiero está apostando a que el Euro se hunde. George Soros ya lo hizo con la libra y ganó muchísimos millones de una tacada. Ello reportaría a los apostantes una jugosa ganancia y de paso hacen negocio con los países que se arruinan pues aparte de endeudarlos de por vida, pueden comprar empresas públicas y privadas a precio de saldo.

Primero crean la deuda simplemente en connivencia con los políticos y luego se hacen dueños del país. Embargar patrimonio a un país endeudado, puede ser una realidad una vez se apruebe el MEDE el uno de julio, pues este mecanismo, en teoría creado para salvar a los gobiernos en apuros, tiene otra cara más siniestra: capacidad judicial para embargar y reclamar el dinero a aportar que le imponga a cada país de la unión. También pueden quitar o poner gobiernos títere de la banca como ya ha ocurrido en Grecia e Italia, Reino Unido o Hungría, por presión mediática de la prima de riesgo o escándalos nimios como es el caso de los dos últimos.

Esta trama diseñada en Estados Unidos no es nueva. Vienen haciéndolo el FMI y el Banco Mundial en el resto del mundo hace décadas. Haití, Irak, Ecuador, Venezuela, Chile, Nicaragua, Albania, Chile, Grecia, también cayeron por las buenas o por las malas.

Pero el ciudadano piensa como persona que es y no se percata de que un financiero nunca nos ve como personas sino como números, como ganancia en potencia. El medio es lo de menos, importa el fin. Deberíamos mirar a los banqueros como lo que son: jugadores de juegos de azar. Y han montado el mundo como un casino. Ellos apuestan a que hunden una moneda y les importa poco si la economía real, la productiva no la financiera, se hunde. Para empezar son cortoplacistas. La ganancia ahora se da a corto plazo y con poca regulación del mercado. Si el largo plazo les importara no nos llevarían a todos al abismo.

Y no se trata de un complot, sino de una trama ostensible para el que quiera verla, en la que unos pocos en términos relativos pero muchos en términos absolutos, las élites (económica, de medios de comunicación, de universidad, política, militar y de inteligencia), salen beneficiadas.  Restringir las libertades, aumentar la edad de jubilación, bajar los sueldos, las reformas laborales, bajar la calidad de la enseñanza pública y la sanidad, la venta de las empresas públicas, todo con la escusa de sanear unas cuentas. La realidad es otra: trasvasar el dinero y el patrimonio del ciudadano a la cartera de la banca. La vieja canción del liberalismo no sirve para nada. No crea riqueza, no salda deudas, todo lo contrario, empobrece. Nos hipoteca de por vida.

Porque ya no se trata de pagar la deuda que han generado principalmente los bancos españoles. Hay una banca por encima, americana para más señas, que se puede forrar con el hundimiento del Euro y España es un blanco perfecto. En Italia y Grecia, en el BCE, en puestos claves de la Unión Europea ya tienen a muchos de los suyos, Mario Monti, Draghi, Karolos Papúlias. Aquí podrían poner a otro pirata. Estos tíos dominan los juegos de azar como nadie, las complejas figuras de inversión que pocos economistas conocen a fondo, y no quieren obstáculos. Esa es su prioridad.

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Roosevelt y Wall Street se forraron con el rearme alemán y jugaron a ambos lados de la guerra. La historia pone después al primero como libertador. El destrozo que causaron todos lo conocemos. Tras tocar fondo Europa se rehizo.

Ya no es una cuestión de negocios, que también. Estamos hablando de ludópatas

No pensemos como ciudadanos, pongámonos en su cabeza. Son banqueros ¿Para que iban a querer sociedad del bienestar? Ellos confían en su capital y su poder para salvarse igual que tú confías en que la ciencia, que dominan ellos, te va a salvar en un mundo que se viene a pique, en todos los sentidos, no solo en el financiero. Capitalismo de lo más salvaje. Eso es lo que quieren. Países competitivos como China. Salarios y trabajo de esclavos. Capitalismo de Estado como en China o como en el Chile de Pinochet. Gobiernos títere como tuvieron gracias al buen hacer de Kisinger, a la postre premio Nobel. Solo unas cuantas empresas con el negocio de todo un país, sin competencia. El paro les proporciona mano de obra barata.

El FMI arruinó, hizo y deshizo en todos los países donde metió la zarpa. Prestó dinero a cambio de imponer sus tesis. Pero si nos ahogan en deuda la economía no puede producir  ¿Y qué? Ahora mismo los bancos están haciendo negocio vendiendo dinero a los Estados al precio que marca la prima de riesgo mientras ellos lo compran al Banco Central Europeo al 1%¿Para que conceder créditos a los ciudadanos? Antes el Estado imponía el interés al que se financiaba, ahora lo imponen los mercados, la banca. Siempre estaremos endeudados. Europa no tiene protección contra el ataque de los especuladores por que son éstos los que han diseñado la Europa de hoy.

Por otro lado, en un mundo global en el que el capital es dueño y señor, en el que cada vez se eliminan más fronteras, el capital, las mercancias y la mano de obra se mueve a merced de la canción de Milton Friedmann, el lumbreras del libre mercado. Se llevan el dinero a otro lado, o sacarán dinero vendiendo armas a los estados, blanqueando el dinero de la droga o lo que sea. Afganistán, Ecuador, Chile, Méjico,....venta de empresas públicas a precio de saldo, compra de empresas arruinadas a precio de saldo, embargo de patrimonio, en fin todo puede ocurrir y solo depende de la respuesta del ciudadano.

Seguimos durmiendo

Tenemos todo el poder...en potencia. Pero seguimos durmiendo.

Despertemos no solo por solidaridad, sino porque después vamos nosotros. Nuestra cultura, nuestra sociedad, nuestra libertad esta en juego. Tenemos la ocasión de desmontar gracias a Internet lo que de otra forma nos costaría sangre, sudor y lágrimas. Información y movilización con el mínimo esfuerzo. Pero esto pasa por cada uno de nosotros, tenemos una responsabilidad ante la historia, una ocasión de oro que no podemos desperdiciar. Ya nos han engañado bastante. NO PODEMOS QUEJARNOS SINO HACEMOS NADA. NO PODEMOS DEJAR LO QUE ESTAMOS DEJANDO A LOS QUE VIENEN DETRÁS. NO ES CUESTIÓN DE SER CATASTROFISTAS SINO REALISTAS. NO ESPEREMOS A QUE VENGAN MEJORES TIEMPOS DESPUÉS DE UNA CATÁSTROFE PORQUE DESPUÉS TODO PUEDE SER PEOR. ESTÁ EN NUESTRAS MANOS EVITARLO.

Desde que entró el euro en circulación la economía especulativa se ha disparado, pues fue diseñado por el poder financiero. Si el origen de nuestros problemas está en unas estructuras de mercado (Europeo para más señas) que se imponen a nuestras constituciones democráticas, al menos sobre el papel, es decir, si el sistema económico de libre mercado si impone a un sistema político democrático, la solución puede estar en refugiarse en los sistemas legales que todavía nos pueden proteger. En nuestros Estados. Ellos venden esto como un pensamiento retrógrado propio de extremistas ¿Pero quién son los antisistema, quién los extremistas, quién los fascistas?¿Quién está acabando con nuestras democracias?

 Unamos nuestras fuerzas contra el euro. Salgamos del euro.