EL FUTURO DE CATALUÑA
Leo unas
declaraciones que se atribuyen a Cayo Lara. El coordinador de IU afirma, en
sustancia, y según esta versión de los hechos, que el futuro de Cataluña lo
debe decidir el conjunto de los españoles. Si las palabras de Lara son, mal que
bien, ésas, no acierto a entender la defensa que la coalición que dirige hace,
cierto que a menudo con la boca pequeña, del derecho de autodeterminación. El
argumento presuntamente esgrimido por Lara bebe, antes bien, del arsenal
ideológico del nacionalismo español y atiende comúnmente al propósito de evitar
que el derecho de autodeterminación pueda ejercerse en plenitud.
Porque, al fin
y al cabo, lo que nos viene a decir es que de nada serviría que en un eventual
referendo un 70% de los catalanes se pronunciase por la independencia si la
mayoría de los españoles no diese su visto bueno al respecto. Bueno sería que
Lara aclarase sus palabras, no vaya a ser que más de uno decida interpretar que
es uno más de los defensores de la Constitución como cerrojo que protege esencias
e integridades territoriales. Menos aún me gustaría tener que llegar a la
conclusión de que en las palabras de Lara hay algún cálculo electoral poco
edificante.
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