ENFERMERAS A 4 EUROS LA HORA
Mientras en Portugal el incremento de la
explotación acompaña los “rescates” de la troika, los buitres aprovechan el
estado de shock de la ciudadanía para deshacer todos los avances sociales y
devolvernos a los tiempos de la Inquisición y las hogueras. En tanto que los
salarios están en caída libre, el actual gobierno del PSD/CDS, dificulta la
aplicación de la Ley 16/2007 del Servicio Nacional de Salud que responde a la
voluntad expresada por los portugueses en el referéndum sobre la
despenalización del aborto (el SI ganó con el 59,25% de los votos).
Portugal es un país ahogado por recortes
en todos los sectores públicos: las pagas extras de los funcionarios y los
pensionistas desaparecieron en otoño y los salarios caen por debajo del umbral
de la dignidad: los cuatro euros por hora de los nuevos contratos para unos
sesenta enfermeros de hospitales y sanatorios públicos de algunas regiones del
país han significado, para muchos, la gota que colma el vaso de una
“austeridad” insoportable mientras se ataca el sistema nacional de salud. Por
ejemplo informaba El Pais que una enfermera, Ángela Mendes, del Centro de Salud
de Torres Novas(Centro) a 90 km. de Lisboa, ha conseguido un empleo firmando un
contrato por cuatro euros a la hora, lo que significa unos 250 euros netos al
mes.
Entre 2008 y 2011 y con la crisis
golpeando con toda su dureza, el número de abortos legales aumentó en Portugal
de 18.014 a 19.802, y a pesar de ello sigue siendo el país con el menor número
de interrupciones voluntarias del embarazo. Quienes desde el obtuso
fundamentalismo religioso se oponen a la voluntad popular libremente expresada,
responsabilizan a la ley de despenalización del aborto por la caída de la tasa
de natalidad, y no quieren saber nada de la insoportable precariedad en las
condiciones de vida y salarios, ni de la falta de apoyo a la maternidad. La
insistencia en falsos argumentos por motivos ideológicos no hace sino confirmar
la identificación inequívoca y el apoyo sin fisuras a las políticas
neoliberales de la derecha del conservadurismo religioso, con las enmiendas que
han socavado la legislación laboral contra los trabajadores y trabajadoras, y los
recortes (como hachazos) de importantes beneficios sociales. Pero además, como
leemos en Avante la pérdida de derechos laborales y de ciudadanía son también
la expresión concreta de la falta de respeto por la función social de la
maternidad y la paternidad.
Defender la Salud Sexual y Reproductiva
Cinco años después del referéndum y la
aprobación de la Ley 16/2007 que despenalizó la opción del aborto para las
mujeres hasta las 10 semanas, sigue siendo fundamental que el Estado cumpla
algunas premisas fundamentales como la amplia difusión de los contenidos de la
ley para que la conozcan a fondo los distintos segmentos de la población, con
el convencimiento de que sólo los servicios de salud pública garantizan la
atención humanitaria, rapidez, seguridad y privacidad necesarias. La aplicación
de esta ley es inseparable de la función insustituible del Sistema Nacional de
Salud en la promoción de todos los derechos sexuales y reproductivos de las
mujeres, ya que garantiza la atención especializada en la atención del
embarazo, parto y puerperio, el acceso a la educación para la salud y la
sexualidad; la accesibilidad a servicios de asesoramiento sobre planificación
familiar y anticonceptivos de forma gratuita, y la prevención y el tratamiento
de las enfermedades ginecológicas y reproductivas, así como el tratamiento de
los casos de infertilidad.
De hecho, en Portugal (y no sólo)
estallan por todas sus costuras las contradicciones sociales de la crisis con
la política de salud. En el pais vecino, además, y desde la vertiente de
género, las tensiones se agravan con los ataques a la no aplicación de la Ley
16/2007. Pero la disyuntiva a la que debe hacer frente la ciudadanía es bien
clara: O bien se apuesta por un servicio público de salud que sea amigo de la
población en su conjunto y de las mujeres y el derecho a decidir dentro de los
supuestos legales, o se apuesta por el medievalismo y la destrucción de la
sociedad, permitiendo que de nuevo los abortos ilegales pongan en precario la
vida… mientras se paga a 4 euros la hora el trabajo del personal de enfermería
en los centros sanitarios.
PUBLICADO EN
http://puntsdevista.wordpress.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario