LA CRUE NO NOS REPRESENTA
Tras las protestas masivas en las
universidades públicas contra los recortes, y concretamente exigiendo la
derogación del Real decreto-ley 14/2012, el Ministro Wert se vio obligado a
negociar.
El interlocutor del Ministro ha sido,
por ahora, la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE),
que se ha limitado a poner el acento en dos aspectos del RDL, la subida de
tasas de ingreso y la subida arbitraria de la dedicación docente (‘sexeniazo’).
El Ministro se negó a negociar la subida de tasas y únicamente cedió en crear
una comisión que estudie cómo se lleva a cabo la subida de la dedicación
docente a medio plazo.
Sin embargo, la CRUE no ha dicho nada de
la imposición del déficit cero (“estabilidad presupuestaria”) a la Universidad,
ni sobre la entrada de empresas privadas en los títulos oficiales. Y estos dos
puntos, recogidos en el nefasto RDL, abren la puerta a la privatización total
de la Universidad Pública. Es más, la CRUE se ha mostrado favorable a que la
austeridad impacte en la Universidad, cuando en tiempos de crisis tras una
burbuja inmobiliaria debería ser todo lo contrario: más inversión en Educación
e Investigación para un cambio de modelo productivo y para apoyar la igualdad
de oportunidades y la cohesión social.
Tras abrir un diálogo precario con el
Ministerio, muchos rectores han vuelto a sus universidades a poner en marcha
los recortes, pasando de la oposición a la colaboración.
La CRUE ha cumplido y sigue cumpliendo
un papel de bisagra, o directamente de correa de transmisión, entre los
recortes de los gobiernos central y autonómicos y la comunidad universitaria,
una bisagra que permite abrir la puerta de la Universidad a los recortes y la
privatización. Y no es la primera vez que pasa, sucedió algo parecido en la
lucha contra la Ley Orgánica de Universidades (LOU) hace unos diez años y,
posteriormente, con la puesta en marcha del ‘Plan Bolonia’. Los rectores están
donde están para cumplir con su papel, para cumplir con la ley, por injusta que
sea.
En vista de todo esto y de cara a las
luchas que están por venir que serán muchas y duras (reforma de la LOU,
negociación de convenios colectivos de universidad, más recortes, etc.), debemos
tener claro que la CRUE no nos representa, no es un interlocutor válido para
representar a la comunidad universitaria que lucha por una Universidad Pública,
Democrática y de Calidad para todos y todas.
Desde el SAT-US animamos a construir la
lucha contra los recortes y por la construcción de nuestra Universidad desde
abajo, sin dejar en manos de unos pocos nuestro futuro y el de la Universidad
Pública. En este sentido, ofrecemos la herramienta sindical del SAT-US desde
una perspectiva asamblearia y radicalmente democrática a toda la plantilla de
la US que quiere luchar y parar los recortes.
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